La pandemia cambió el panorama inmobiliario. Los espacios de trabajo remoto aumentaron la demanda de viviendas más grandes y flexibles, mientras que las ubicaciones suburbanas ganaron popularidad. La tendencia hacia el trabajo desde casa ha impulsado la necesidad de oficinas en el hogar y zonas al aire libre. A medida que la pandemia evoluciona, el mercado sigue adaptándose a las nuevas demandas de los compradores.